El TPM (Mantenimiento Productivo Total) es un sistema destinado a eliminar o reducir las ineficiencia del sistema productivo en tres aspectos fundamentales.
Tres aspectos fundamentales:
- Tiempos muertos o paros del sistema productivo.
- Funcionamiento a velocidad inferior a la capacidad de los equipos.
- Productos defectuosos o mal funcionamiento de las operaciones en un equipo.
El TPM es muy útil para las empresas puesto que logran maximizar la efectividad del equipo a través de toda su vida útil al 100%, consiguiendo:
- Cero Averías
- Cero Retrasos
- Cero Defectos
Para ello debemos pasar del: “Yo opero, tu reparas” a “Yo soy responsable de mi equipo”. Trabajamos para incrementar la implicación de toda la plantilla en el cuidado, limpieza y mantenimiento de los equipos.
¿Qué consigue una empresa aplicando TPM?
- Mejoras en productividad.
- Mejoras en calidad.
- Mejoras en tiempos de entrega.
- Mejoras en seguridad.
- Mejoras en higiene.
- Mejoras en la moral de los empleados.